El niño fue trasladado a la Clínica Valle del Lili tras permanecer 19 días secuestrado en Jamundí por disidencias de las Farc.
Luego de casi 20 días de cautiverio, este 21 de mayo fue liberado Lyan Hortúa, el niño secuestrado en zona rural de Jamundí, Valle del Cauca, por integrantes de las disidencias de las Farc. El menor fue entregado a una comisión humanitaria y trasladado de inmediato a la Clínica Valle del Lili en Cali para evaluar su estado de salud.
Su madre, Angie Bonilla, calificó el reencuentro como un renacer. “Volví a nacer con mi hijo”, expresó entre lágrimas, al tiempo que desmintió cualquier vínculo de su familia con actividades ilegales. La mujer detalló que el niño presentaba signos de ansiedad, las uñas comidas y un visible estado de nerviosismo. “Es momento de sanar”, afirmó.
Por su parte, Jorsuar Suárez, padrastro de Lyan, reveló que el niño estuvo amarrado durante los primeros cuatro días del secuestro. Aunque lograron comunicarse con él en dos videollamadas, el menor intentó tranquilizarlos diciendo que lo trataban bien. El familiar cuestionó cómo los captores ingresaron al condominio pese a sus estrictos filtros de seguridad.
La familia, a pesar del dolor vivido, ha optado por el perdón. Su testimonio pone en evidencia la vulnerabilidad de las comunidades ante el accionar de grupos armados ilegales, especialmente en zonas como Jamundí.