Así desprende tras la modificación al Plan de Ordenamiento Territorial, POT, que realiza la administración municipal de la capital del Meta.
Un mejor Plan de Ordenamiento Territorial (POT) es una mejor ciudad que cuida sus recursos naturales frente al reconocimiento y protección de la biodiversidad de la capital del Meta.
En el actual POT, sólo se encontraron 147 humedales, y hoy, gracias a los estudios realizados para la modificación del POT, se reconocieron 792 nuevos. De estos cerca del 60 por ciento corresponden al suelo rural, el 36 por ciento a suelo de expansión urbana y el 4 por ciento a suelo urbano, dejándole a Villavicencio 939 humedales.
Así mismo, se priorizaron 11 corredores biológicos, donde se encuentran especies como el mono zocay, gallito de roca, ranita juanii, mono ardilla y el oso palmero, teniendo como resultado 14 áreas protegidas para la protección ambiental.
La secretaria de Medio Ambiente, Sara Cabrera, resalta la importancia de la actualización del POT porque «teníamos una visión de ciudad muy sesgada respecto a la estructura ecológica principal del municipio. Somos de las pocas ciudades del país que estamos viendo hacia la sostenibilidad desde la apropiación social de la biodiversidad».
Por otro lado, se hizo una inversión por más de 3.403’741.100 pesos en convenio con la Universidad Nacional para la incorporación de los estudios de amenaza, vulnerabilidad y riesgo, para determinar con mayor precisión las zonas que están en riesgo