La Contraloría advierte un posible apagón por deudas millonarias y falta de proyectos energéticos.
La Contraloría General de la República alertó sobre el riesgo de un racionamiento energético en Colombia debido a deudas acumuladas que superan los $7 billones y la falta de nuevos proyectos en el sector. Según el Contralor General, Carlos Hernán Rodríguez Becerra, la situación podría afectar gravemente a los estratos 1, 2 y 3, los más vulnerables del país.
En un informe reciente, citado por medios oficiales, la Contraloría reveló que las deudas por subsidios y opción tarifaria ascienden a $6,7 billones. A esto se suma la deuda de entidades públicas con las empresas de energía y gas, lo que pone en riesgo la sostenibilidad del sistema y el acceso a servicios básicos.
El ente de control convocará a los ministros de Minas y Energía y de Hacienda, además de la Procuraduría y gremios del sector, para buscar soluciones inmediatas. Entre las propuestas está garantizar los pagos pendientes a las empresas y diseñar mecanismos financieros claros para cubrir los subsidios.
Si no se toman medidas, el impacto podría ser devastador. Las familias de bajos recursos, que actualmente pagan tarifas subsidiadas, podrían enfrentar aumentos significativos. Por ejemplo, una familia que paga $30,000 por gas tendría que pagar cerca de $58,000 sin el subsidio, según datos del Comité Intergremial de Energía y Gas.
La Contraloría también señaló que los problemas de liquidez podrían obligar a las empresas a desmontar los subsidios, generar alzas en las tarifas y aumentar la cartera vencida, profundizando la crisis. Esto amenaza no solo a los usuarios, sino también a la confianza de los inversionistas públicos y privados.
El llamado es claro: el Gobierno Nacional debe actuar de manera urgente y efectiva para garantizar la seguridad energética del país, proteger a los ciudadanos más vulnerables y salvaguardar el patrimonio estatal.