Miles de personas en Puerto Carreño enfrentan un apagón total, afectando a los hogares y el comercio local. ¿Por qué ocurre esto?
Desde el 2 de enero, la capital del Vichada, Puerto Carreño, sufre un apagón que afecta a 45 mil habitantes. Según el gobernador Alex Benito, el Gobierno Nacional adeuda más de $1.600 millones a Refoenergy, generadora de energía de biomasa, y $4.900 millones a Terpel, proveedor de combustible para Electrovichada, empresa responsable del 70% de la energía en la región.
El apagón es crítico debido al clima cálido extremo de la región, con temperaturas de hasta 40 grados. Los víveres y la calidad de vida de los habitantes están comprometidos, mientras el gobernador intenta sin éxito contactar al viceministro de Energía, Javier Campillo.
Electrovichada y Refoenergy han explicado que la falta de giros desde marzo de 2024 para subsidios eléctricos y desde septiembre de 2024 para electrocombustibles imposibilita operar con biomasa y diésel. Las mesas de trabajo con el Ministerio de Minas y Energía no han resuelto la crisis.
El ministro de Hacienda, Diego Guevara, prometió liberar recursos el 3 de enero, pero el gobernador insiste en que el Ministerio de Minas debe liderar la solución inmediata y estructural para restablecer el servicio eléctrico.
La comunidad de Puerto Carreño exige respuestas urgentes, mientras la ciudad permanece en la penumbra, exponiendo una crisis energética que pone en jaque la calidad de vida y la gobernabilidad en una región olvidada.