El paro arrocero sigue sin acuerdos tras cuatro días, con bloqueos en varias regiones que afectan el transporte, el comercio y la economía del país.
Foto: Infobae
El paro de los arroceros en Colombia llegó a su cuarto día sin avances en las negociaciones con el Gobierno. Los bloqueos en vías estratégicas de Tolima, Huila, Meta, Cesar y Casanare han afectado a miles de transportadores y viajeros, quienes enfrentan largas demoras y pérdidas económicas.
En Tolima, los manifestantes mantienen cierres en Gualanday, Natagaima, Saldaña y Armero, afectando el tránsito hacia Ibagué y el Alto de La Línea. En Huila, los bloqueos en la Ruta 45 impactan el comercio con Putumayo y Caquetá. En Meta, los cortes en Puerto López complican la conexión con Vichada, mientras que en Cesar y Casanare los productores han cerrado rutas clave hacia la Costa Caribe y el oriente del país.
Los arroceros exigen precios justos por su producción, tarifas diferenciales en el cobro del agua y frenar las importaciones y el contrabando de arroz. Aseguran que las condiciones actuales los están llevando a la quiebra, con pérdidas de hasta 2,5 millones de pesos por hectárea.
Las reuniones entre el gremio y el Gobierno no han logrado consensos. Los agricultores insisten en que la decisión debe escalar a los niveles más altos del Ejecutivo, incluyendo la intervención directa del presidente.
Mientras las protestas continúan, sectores como el transporte y el turismo ya registran pérdidas significativas. Los transportadores advierten que cada hora detenidos representa un golpe financiero, y en las zonas turísticas, la cancelación de reservas genera preocupación.
La incertidumbre sigue mientras el Gobierno y los arroceros buscan una salida. Por ahora, las vías bloqueadas y la falta de acuerdo mantienen en vilo a miles de colombianos.
Tomado de Noticias Caracol