En Colombia, 578 mil licencias de conducción están próximas a expirar. La renovación es vital para evitar sanciones y garantizar la seguridad vial.
A medida que se acerca el final del año, más de 578 mil conductores en Colombia enfrentan la urgente necesidad de renovar sus licencias de conducción, según información de OlimpIA, compañía líder en ConfIAnza Digital. Esta situación destaca la importancia de mantener las licencias vigentes, no solo como un requisito legal, sino como una medida crucial para preservar la seguridad vial en el país.
De las licencias que deben renovarse, 129 mil pertenecen a mujeres y 449 mil a hombres. Conducir con una licencia vencida puede resultar en sanciones económicas de hasta $COP 346.666, además de la posibilidad de que el vehículo sea inmovilizado. Esto puede ser especialmente problemático durante la ajetreada temporada de fin de año, cuando el tráfico aumenta y las necesidades de movilidad se intensifican. Es fundamental que los conductores revisen la fecha de vencimiento de su licencia y actúen a tiempo.
"La cantidad de licencias por vencer es significativa. La renovación es clave no solo para evitar multas, sino para asegurar que los conductores estén en condiciones óptimas para seguir conduciendo", afirmó Simbad Ceballos, CEO de OlimpIA. En los últimos 18 meses, se han procesado más de 5,5 millones de trámites relacionados con licencias, destacando que 3,1 millones corresponden a motociclistas, lo que pone de relieve el desafío que enfrentan las autoridades de tránsito.
Para aquellos que necesiten renovar su licencia, el proceso se ha simplificado considerablemente. A través de la plataforma www.milicencia.co, los usuarios pueden seleccionar el Centro de Reconocimiento de Conductores más cercano, pagar en línea los exámenes médicos y agendar citas en centros autorizados, todo sin largas esperas. Este enfoque digital no solo mejora la experiencia del usuario, sino que también contribuye a la eficiencia del sistema de transporte.
Antes de realizar la renovación, los conductores deben cumplir con ciertos requisitos: estar inscritos en el Registro Único Nacional de Tránsito (RUNT), no tener multas de tránsito pendientes —verificables a través del SIMIT—, aprobar el examen médico correspondiente y pagar los derechos de trámite establecidos por el organismo de tránsito de su localidad.