¿Los tomates cherry son el nuevo emprendimiento de cultivo en el Meta?

Pero Diana Vanegas, una productora agropecuaria junto a su esposo un biólogo, han logrado innovar en el departamento del Meta con La Villa del Oso, una pequeña granja donde cultivan productos agro y orgánicos, y sobresalen por los tomates cherry. Hace tan solo 3 meses, ellos iniciaron las ventas de este fruto, que por hoy ya no les alcanza para abastecer a sus clientes, “la verdad es que siempre tenemos que decir que ya se nos acabó” asegura Vanegas.

Esta idea de emprendimiento, nació en una cena familiar, porque Diana y sus allegados tienen un gusto por la comida sana, por probar diferentes semillas, y procurar las verduras al comer, así, un día prepararon una ensalada, y notaron el sabor especial de los tomates cherry, “fue todo un hit, desde ahí le vimos el potencial al tomate” resalta la productora agropecuaria.

Este proyecto, comenzó en mayo del año 2019, con un proceso de reforestación, y la creación de una estrategia ambiental y familiar, de esta manera, se dieron cuenta que podían producir sosteniblemente sin afectar los recursos naturales de la finca, y generar una producción limpia.

La cosecha, que ya tiene una producción aproximada de 50 libras semanales, se encuentra en la finca San Pedro de Guajaray, a 29 minutos de Cumaral, en donde recolectan también cilantro, pimentón, ahuyama, pepino, cohombro, y habichuela, pero con los tomates cherry fue que conocieron la posibilidad de un buen mercado de estos en la región, y por la poca productividad que hay en el Meta, de este modo, emprendieron con el fruto hace poco tiempo, y ya son proveedores en la Puerta del Llano de restaurantes gourmet, casas, y negocios de comidas balanceadas.

Además, despiertan en la comunidad campesina otra alternativa productiva diferente al ganado, “que por hoy es el primer renglón que promueve la deforestación en nuestro departamento, cuidamos el medio ambiente porque no utilizamos productos químicos, reforestamos las fuentes hídricas y no tenemos monocultivos, hacemos educación ambiental en la vereda, y usamos empaques ecológicos para la entrega, la cual es a domicilio” apunta una de las creadoras de La Villa del Oso.

Esta nueva opción de siembra en los Llanos Orientales, ahora se da por la iniciativa de la anterior empresa nombrada, con una planta que no era muy común antes en la región porque no era un cultivo que llamara la atención en los agrónomos o campesinos, así mismo, como culturalmente no se consumía, pero con la tendencia de la comida saludable las personas han empezado a consumirlo y los restaurantes lo han implementado en sus ingredientes.

De la misma forma, la productora agropecuaria de este proyecto dice que cuando empiecen las lluvias van a sembrar mucho más, pues han abierto su visión de negocio, y piensan construir un lugar de pos-cosecha de crecimiento mayor en la finca.

Diana Vanegas, también manifiesta, que estos modelos además de permitir la seguridad alimentaria de una familia, se vuelve una estrategia productiva a pequeña y gran escala, siempre garantizando el cuidado del ambiente e incentivando a las comunidades a la producción sana y limpia.