Audrey Backeberg, vista por última vez en 1963 en EE. UU., fue hallada con vida gracias a un detective. Su desaparición fue voluntaria.
Después de más de seis décadas, las autoridades estadounidenses localizaron con vida a Audrey Backeberg, una mujer que había desaparecido en 1963 en Reedsburg, Wisconsin. En ese entonces, tenía 20 años y fue vista por última vez en un paradero de bus junto a la niñera de su familia, con destino a Indianápolis. Tras perder contacto con ella, el caso fue investigado sin éxito y posteriormente archivado.
La investigación fue reabierta por el detective Isaac Hanson, como parte de un proceso de revisión de casos sin resolver. Hanson utilizó herramientas de genealogía digital, como Ancestry.com, para rastrear registros relacionados con la familia de Backeberg, lo que permitió encontrar una dirección coincidente con su identidad.
La mujer, actualmente de 82 años y madre de dos hijos nacidos antes de su desaparición, fue localizada en otro estado del país. Según las autoridades, su desaparición fue una decisión personal y no hubo delitos involucrados. Las razones detrás de su alejamiento no fueron reveladas, aunque el Proyecto Charley indica que vivió un matrimonio conflictivo desde los 15 años.
El detective relató que, tras contactarla, la mujer respondió su llamada y conversaron durante 45 minutos. Afirmó que ella parecía tranquila y segura de la decisión que había tomado décadas atrás.