El maíz tecnológico que revoluciona la industria alimenticia
La semilla de maíz de Corteva impulsa la producción de arepas con características únicas que transforman la industria.
Corteva Agriscience ha marcado un hito en la industria alimenticia de Colombia gracias a sus semillas de maíz biotecnológicas, que no solo mejoran el rendimiento de los cultivos, sino que también ofrecen características exclusivas en sabor, aroma y consistencia, claves para productos como las arepas.
El maíz, un elemento central en la dieta de los colombianos, se ha beneficiado de las innovaciones de Corteva, especialmente a través de su marca de semillas Pioneer. Con una participación de mercado cercana al 60% en Colombia, estas semillas híbridas han demostrado ser esenciales para productores como Arepas El Carriel, una empresa que ha logrado expandirse a nivel internacional, llegando a mercados como Estados Unidos e Inglaterra.
Luis Alberto Valencia, gerente fundador de Arepas El Carriel, destaca cómo las semillas Pioneer han sido cruciales para su negocio. "Hemos probado otras semillas, pero ninguna nos ha dado los resultados que necesitamos para mantener la calidad de nuestras arepas. El maíz debe comportarse de cierta manera al cocinarse, y las semillas de Corteva nos garantizan eso", afirma Valencia, quien ha logrado rendimientos de hasta 9.3 toneladas por hectárea con expectativas de alcanzar las 11 toneladas.
La innovación y la apuesta por tecnología avanzada han sido fundamentales para empresas como Arepas El Carriel, que siembra cerca de 2.000 hectáreas de maíz. Este crecimiento es respaldado por Corteva, que continúa desarrollando semillas que no solo optimizan el rendimiento, sino que también protegen los cultivos de plagas, asegurando sostenibilidad a largo plazo.
David Reynales, líder de agronomía en Corteva, subraya la importancia de estas semillas en el éxito de los productores. "Nuestra tecnología ofrece a los agricultores control sobre plagas y la capacidad de cumplir con las demandas del mercado en términos de calidad y rendimiento", comenta Reynales.
La historia de Arepas El Carriel, que comenzó hace 32 años, es un ejemplo de cómo la tecnología agrícola puede transformar la producción de alimentos tradicionales y llevarlos a nuevos horizontes. La combinación de semillas de alta calidad y prácticas agrícolas sostenibles promete un futuro próspero para los productores de maíz en Colombia.