La congresista María Elvira Salazar alertó que, ante el avance del narcotráfico, Estados Unidos mantiene abiertas todas las opciones frente al gobierno colombiano.
En medio de crecientes tensiones diplomáticas, la representante republicana María Elvira Salazar advirtió que Colombia se encuentra “en la mirilla de la Casa Blanca”. En entrevista con Mañanas Blu, la congresista del sur de la Florida aseguró que el gobierno estadounidense evalúa medidas frente al manejo del narcotráfico en el país y la postura del presidente Gustavo Petro hacia Washington. “Todo es posible”, afirmó.
Salazar, experiodista e influyente figura del Partido Republicano, señaló que durante tres años ha intentado explicarle a la administración estadounidense que Petro debe “emendar su camino” y no “jugar con la democracia colombiana”. Según dijo, Washington busca cooperar con el pueblo colombiano, pero el presidente “insiste en ser enemigo de Estados Unidos”.
La congresista recordó un encuentro en el Capitolio donde Petro habría sido “despótico” al referirse a la ayuda económica de EE. UU., y afirmó que el país norteamericano espera respeto por su apoyo a Colombia. “El colombiano promedio desea una relación sólida con Estados Unidos, como la que mantiene el presidente Milei en Argentina”, añadió.
El narcotráfico, dijo Salazar, es el punto más crítico de la relación bilateral. Criticó que las plantaciones de coca se hayan triplicado y aseguró que esta situación “revirtió los logros alcanzados por gobiernos anteriores”. Además, respaldó el mensaje del presidente Donald Trump, quien calificó a Petro como un “líder del narcotráfico”, argumentando que “si un mandatario permite el aumento de cultivos ilícitos, se convierte indirectamente en su promotor”.
La congresista republicana también recordó que Petro ha afirmado en el pasado que “la cocaína es mejor que el petróleo”, declaración que, según ella, profundiza la distancia con Washington. Finalmente, advirtió que la Casa Blanca ha adoptado una postura más firme con los países productores de droga, citando la crisis del fentanilo como ejemplo de los efectos devastadores de estas políticas.
Desde su perspectiva, Estados Unidos ya no tolerará que los gobiernos latinoamericanos “jueguen con la estabilidad de su democracia interna y la seguridad regional”.
Tomado de Bluradio