Debido a su acción contra el envejecimiento de la piel, la vitamina E es uno de los principales ingredientes de muchas cremas antiedad comerciales.
La vitamina E ha sido reconocida como la vitamina de la juventud y de la vida gracias a su enérgico efecto contra los radicales libres, que son los causantes del proceso de envejecimiento de las células y la piel. Es por ello que si estás buscando un buen aliado de belleza natural que te ayude a verte más joven y hacer frente a las arrugas visibles, empezar a usar vitamina E a modo externo es una apuesta segura.
Entre las fuentes más importantes donde disponer de esta vitamina se encuentran:
1) Debido a su acción contra el envejecimiento de la piel, la vitamina E es uno de los principales ingredientes de muchas cremas antiedad comerciales, pero si quieres aprovechar sus propiedades de una forma más directa, te recomendamos adquirir las cápsulas de vitamina E que puedes encontrar en herboristerías, farmacias o tiendas especializadas en la venta de productos naturales.
2) Aplicar la vitamina E directamente sobre la piel del rostro es una medida sencilla que realmente te beneficiará a largo plazo, pues ayuda a retrasar los efectos del envejecimiento. La piel está diariamente expuesta a la acción de los radicales libres, los cuales perjudican la producción de colágeno y la regeneración celular derivando en un desarrollo prematuro o más acelerado de las arrugas en el rostro. Además, la vitamina E protege la piel de los agentes ambientales contaminantes y de los rayos solares.
Solo tendrás que aplicar su contenido sobre la piel del rostro bien limpia justo antes de irte a dormir para que penetre perfectamente en ella durante toda la noche. Con este sencillo paso, tu piel empezará a estar mucho más vital, fresca y joven.
3) Otra forma de aplicar vitamina E en la piel es añadir el líquido de las cápsulas de vitamina E directamente en tu crema hidratante o antiedad habitual, así potenciarás su efecto para prevenir y combatir las arrugas o líneas de expresión. Vierte el contenido de una cápsula en el interior de tu crema y extiéndela sobre el rostro cuando esté completamente limpio y libre de impurezas. Incide en aquellas zonas más perjudicadas por el paso del tiempo y rápidamente empezarás a notar los resultados.
4) La vitamina E también puedes utilizarla para hacer efectivas mascarillas caseras que te permitirán beneficiarte al mismo tiempo de las propiedades hidratantes y rejuvenecedoras de otros ingredientes naturales. Te proponemos elaborar una mascarilla facial a base de pepino y vitamina E, ideal para devolverle al cutis la luminosidad y el resplandor perdido. Para prepararla, tienes que licuar un pepino bien pelado con el líquido de dos cápsulas de vitamina E. Aplica la mezcla obtenida sobre el rostro y reposa durante al menos 10 o 15 minutos con ella puesta.
5) Además de aplicar vitamina E en la piel siguiendo los métodos anteriores, es importante que este nutriente forme parte de tu dieta diaria para favorecer tu estado de salud, pues fortalece el sistema inmunitario y protege al organismo de algunas enfermedades que pueden afectarte a nivel cardiovascular. Por ello, puedes consumir alimentos que contengan esta Vitamina.
RECOMENDACIÓN: No exceder su consumo, ya que puede incrementar el riesgo de sangrado y hemorragia en el cerebro.