Un sobrevuelo sobre la zona permitió detectar los puntos críticos que impiden la normalización del servicio a por lo menos 109 clientes de la EAAV.
Luego de un sobrevuelo efectuado ayer (miércoles) en la tarde por parte del Comando Aéreo de Combate No.2 de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) y en el que también estuvo presente el gerente de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Villavicencio (EAAV), Jacobo Matus Díaz, se confirmó lo que se presumía ocurría en la parte alta de la cordillera Oriental y que estaba afectando el normal flujo de agua en la bocatoma del acueducto de quebrada La Honda.
Producto de las fuertes lluvias que han caído en la zona y según lo confirmó el Comando Aéreo de Combate No.2, un gran derrumbe está afectando el cauce de la quebrada aproximadamente 600 metros más arriba de la bocatoma –en jurisdicción del municipio de El Calvario-, lo cual está originando que a la bocatoma esté llegando prácticamente lodo.
Por esta razón está suspendida la conducción del líquido hasta la planta de tratamiento de La Esmeralda, originando que la mayor parte de la capital del Meta siga sin el servicio de agua potable.
El Comando Aéreo de Combate No.2 y el propio gerente Matus Díaz precisaron igualmente que se pudo detectar que sobre la vía que conduce de la vereda Santa María al puente de la Tarabita, donde inicia la vía hacia la bocatoma, se presentan varios derrumbes producto en principio de explotaciones ganaderas y la deforestación, lo que tiene obstruida la vía en varios puntos dificultando como es obvio la movilización por la misma.
Toda esta situación tiene trabajando a la EAAV en un plan de acción con personal altamente calificado, para avanzar en los trabajos que permitan en el menor tiempo posible vislumbrar soluciones a esta emergencia.
Matus Díaz dijo finalmente, que durante el sobrevuelo también se pudo evidenciar que las aguas del río Guatiquía está de la misma manera bajando con demasiada turbiedad, lo que significa que en caso que estuvieran en servicio las estaciones de bombeo de Bavaria y Puente Abadía, la situación igualmente sería traumática para garantizar la potabilización del agua en la planta de tratamiento de La Esmeralda.