Son $62,2 billones, un presupuesto superior en casi 7 por cierto frente al de este año.
Con estos recursos se priorizará la inversión para atender a los más vulnerables a través de los diferentes programas sociales y se apoyará la reactivación económica con inversiones en diversos sectores.
En inversión social se garantizan $7,2 billones para el programa de Ingreso Solidario que beneficiará a 4 millones de hogares, apoyo que ha servido para mitigar el impacto de la pandemia en los más vulnerables.
Los programas de familias y jóvenes en acción contarán con una inversión de $1,7 billones para atender a 2,6 millones de beneficiarios y la compensación del IVA beneficiará a 2 millones de hogares.
Asimismo, se garantizan los recursos para programas como Colombia mayor; incentivos a la demanda a través del ICETEX para el acceso y permanencia en la educación superior a través, por ejemplo, de Generación E.
Para impulsar reactivación económica, el crecimiento y la generación de empleo se irrigarán recursos a los sectores de transporte, vivienda, y agua potable, principalmente.
Por ejemplo, a transporte se destinan $3,1 billones para los programas concluir, concluir, concluir para la construcción e intervención de más de 1.600 km. mientras que para las concesiones de 3G y 4G se asignan $4,4 billones.
Para infraestructura aeroportuaria y navegación aérea, más de $807.000 millones, destacándose $107 mil millones para el Aeropuerto del Café.
El acceso al agua potable y saneamiento básico con calidad, la construcción de infraestructura productiva y deportiva – recreativa y las alianzas productivas en el agro hacen parte de las inversiones para la reactivación.
Este presupuesto de inversión garantiza los recursos para atender los compromisos del gobierno como las rentas de destinación específica, con las víctimas y las vigencias futuras, entre otros. Esta inversión está alineada con la estrategia de ajuste fiscal de mediano plazo del gobierno Nacional.