El Gobierno logró revertir el rechazo masivo de solicitudes de restitución de tierras y devolvió más de 70.000 hectáreas a víctimas en 2024.
La Unidad de Restitución de Tierras (URT) logró transformar sus procesos administrativos y jurídicos, pasando de rechazar el 65 % de solicitudes a aprobar el 73 %. Este avance permitió entregar más de 70.000 hectáreas de tierra a comunidades indígenas y afrodescendientes en 2024, cumpliendo con las órdenes a favor de las víctimas del conflicto armado.
El director de la URT, Giovanni Yule, explicó que antes existían barreras administrativas que dificultaban las restituciones. "Encontramos mecanismos que torpedeaban el ejercicio administrativo, negando el derecho a las víctimas", afirmó Yule en una entrevista con la Presidencia.
Además de agilizar los trámites, la URT reorganizó programas como el Proyecto Étnico, que prioriza la restitución de territorios colectivos de comunidades afro e indígenas. También, la mediación con despojadores permitió acuerdos sin necesidad de sentencia judicial, como ocurrió en los Montes de María, donde cinco familias recuperaron sus tierras tras más de dos décadas de desplazamiento.
Con estos cambios, el Gobierno busca no solo devolver tierras, sino restituir la vida social, cultural y económica de las víctimas, fortaleciendo proyectos productivos y garantizando acceso a vivienda.