Gobernación del Meta reitera su llamado al Gobierno Nacional para atender la emergencia vial que golpea al transporte, turismo y economía regional.
La Gobernación del Meta, junto con el sector transportador, volvió a reclamar respuestas inmediatas al Gobierno Nacional frente a la grave crisis que afecta la vía Bogotá–Orinoquía. En sesión extraordinaria de la Asamblea Departamental, autoridades, gremios y comunidad advirtieron sobre el impacto económico y social de las restricciones en el corredor vial.
El Puesto de Mando Unificado (PMU) estableció un horario limitado de paso en el kilómetro 18+300: cuatro horas hacia Bogotá y dos hacia Villavicencio. Sin embargo, transportadores y diputados insistieron en que la medida es insuficiente y que se requiere una solución estructural.
Durante el debate, los diputados pidieron la realización urgente de un estudio técnico que defina los recursos necesarios para estabilizar el punto crítico y reclamaron al Gobierno Nacional la declaratoria de emergencia. Según el sector, la demora en las decisiones agrava una situación que afecta a medio país.
Las pérdidas diarias superan los 20.000 millones de pesos en comercio y 50.000 millones en la economía regional, lo que refleja la magnitud del cierre parcial. A esto se suma la crisis del turismo, con ocupación hotelera por debajo del 35 % y cancelaciones cercanas al 80 %.
La Gobernación del Meta reiteró su compromiso de acompañar a los gremios y sectores productivos, y pidió al Ejecutivo nacional asumir con urgencia la atención de una emergencia que compromete el desarrollo de la Orinoquía y del país entero.