Familias que viajen en semana de receso escolar deben vacunarse

La Secretaría de Salud de Villavicencio hizo un llamado para que, en esta semana de receso escolar que empieza hoy lunes, los padres de familia vacunen a sus hijos antes de salir de viaje hacia el interior del país o a zonas marítimas.

 La advertencia se dio por la alerta nacional tras la confirmación de 15 casos autóctonos de sarampión en población colombiana y 108, adicionando la comunidad venezolana en nuestro país.

 Jorge Hernán Mojica Molinares, titular de la dependencia de Salud de Villavicencio, indicó que es necesario que los padres de familia lleven a vacunar a sus hijos contra el sarampión y la difteria, ya que estas enfermedades se han detectado en el vecino país de Venezuela y no se descarta se empiecen a presentar varios casos en nuestro país.

 “Antes de viajar, los padres deben acercarse a las IPS, clínicas y al Hospital Departamental de Villavicencio y completar los esquemas de vacunación de sus hijos menores de 10 años. La vacunación es gratuita y no importa si está o no afiliado a un seguro en salud”, aseguró Mojica Molinares.

 Según cifras entregadas por el Instituto Nacional de Salud, entre marzo y septiembre de 2018 se han notificado 108 casos de sarampión en Colombia, de los cuales en Cartagena en los dos últimos meses se ha reportado 41 casos de menores afectados por esta enfermedad. En Villavicencio se han evidenciado 45 casos sospechosos de sarampión de los cuales 38 fueron descartados por el Instituto y se espera que los siete restantes igualmente sean descartados en los próximos días.

 El Instituto Nacional de Salud recordó que el sarampión es una enfermedad de alta transmisibilidad, prevenible únicamente por la vacuna, causada por un virus y que se trasmite por el contacto de secreciones respiratorias, al inhalar pequeñas gotas expulsadas por una persona contagiada al hablar, toser o estornudar.

 Los síntomas aparecen en dos etapas: en la primera – entre el primer y tercer día – la mayoría de los infectados presenta fiebre, una nariz que moquea (moco transparente), enrojecimiento de los ojos acompañados de ardor, y tos.

 Al observar la boca de un enfermo se pueden identificar manchas blancas, llamadas manchas de Koplic, que se encuentran al interior de las mejillas y pueden parecer granos de sal en un fondo rojo. La segunda etapa inicia entre el tercer y séptimo día, con un brote que inicia en la cabeza –incluido el rostro- que se extienden por el resto del cuerpo en forma descendente.