El cardenal condenado que aún quiere elegir papa

Angelo Becciu, cardenal italiano condenado a cinco años y medio por malversación, se ha convertido en el centro de un debate inédito dentro del Vaticano: si podrá ejercer su derecho a voto en el próximo cónclave para elegir al sucesor del papa Francisco. Aunque oficialmente inhabilitado de por vida para cargos en la Santa Sede, su derecho a participar en la elección papal no está del todo claro.

El escándalo que rodea a Becciu estalló en 2020 cuando el papa Francisco le retiró los derechos vinculados a su cargo tras una investigación por la compra irregular de un inmueble de lujo en Londres y sospechosas transferencias a una ONG familiar en Cerdeña. A pesar de esto, el Vaticano no ha revocado explícitamente su derecho a votar, manteniendo su estatus como cardenal elector, a pesar de superar la edad límite de 75 años.

Becciu defendió su posición públicamente, argumentando que no recibió ninguna exclusión formal ni solicitud de renuncia escrita que le retire sus prerrogativas cardenalicias. El futuro de su participación será debatido en las congregaciones generales previas al cónclave, donde se decidirá si un purpurado condenado y sancionado puede influir en la elección del nuevo líder de la Iglesia Católica.

La condena de Becciu se originó por la compra fraudulenta de un edificio en Chelsea, Londres, antigua sede de Harrods, y la revelación de transferencias por 125.000 euros a una ONG dirigida por su hermano. Este caso ha abierto un debate sobre la ética y la transparencia dentro de los más altos círculos eclesiásticos.

Además de Becciu, otros cardenales como Philippe Ouédraogo y John Njue han despertado dudas sobre su edad y elegibilidad para votar, debido a irregularidades en sus fechas de nacimiento registradas en el Anuario Pontificio. Estos detalles añaden más misterio a un cónclave que ya se prevé histórico.

Tomado de Bluradio