El dólar amaneció en alza y podría seguir subiendo tras la crisis global que desató la nueva guerra comercial impulsada por EE. UU.
Este lunes 7 de abril, el dólar abrió en Colombia con un precio de $4.310, es decir, $36 por encima de la Tasa Representativa del Mercado fijada en $4.274, lo que refleja el impacto inmediato de la incertidumbre internacional provocada por el nuevo paquete arancelario anunciado por el expresidente Donald Trump. La medida, que impone un gravamen del 10 % a todas las importaciones en Estados Unidos, ha desatado una ola de temor en los mercados globales y ha afectado directamente el comportamiento de la divisa en el país.
Mientras en Colombia el dólar alcanzó picos de $4.372 durante las primeras horas del día, las bolsas en Europa y Asia registraron caídas masivas. Tokio cerró con una pérdida del 7,8 %, Shanghái cayó 7,34 % y Hong Kong se desplomó un 13,22 %, su peor jornada desde 1997. En Europa, el Eurostoxx 600 perdió cerca del 5 % y Fráncfort, París y Londres también reportaron fuertes retrocesos. El temor a una recesión a gran escala es cada vez más latente entre inversionistas y gobiernos.
La presión internacional no solo ha golpeado los mercados bursátiles, sino que también elevó el costo del dólar en economías emergentes como la colombiana, donde se teme por una mayor inflación. El encarecimiento de la divisa podría traducirse en aumentos en el precio de productos importados y presionar aún más el costo de vida en el país, especialmente en sectores como el alimentario y tecnológico, altamente dependientes del comercio exterior.
El volumen negociado en el mercado colombiano hasta la mañana alcanzó los 299 millones de dólares, con un precio promedio de $4.349. Este comportamiento confirma la elevada volatilidad del mercado en medio de una coyuntura internacional incierta. Aunque el índice global del dólar ha registrado una leve baja (0,06 %), la tendencia general sugiere un fortalecimiento sostenido de la divisa frente a monedas emergentes.
La decisión de Trump de aplicar aranceles indiscriminados a todos sus socios comerciales, incluidas economías aliadas como Colombia, ha sido duramente criticada. Su argumento de “defender la industria local” ha reavivado los temores de un proteccionismo agresivo y ha puesto en alerta a organismos multilaterales. La imposición del arancel del 10 % ya entró en vigor el sábado, encendiendo alarmas sobre sus posibles efectos de largo plazo.
Tomado de Semana